Editora Musical

 

Suele confundirse editora con impresora, esta última solo se dedica a imprimir, aunque algunas empresas son editoras y también impresoras. Al tratarse de un libro una editora contrata con el autor obligándose a reproducirlo, publicitarlo y distribuirlo estableciéndose el porcentaje de las ganancias para el autor. La Ley 65-00 sobre Derecho de Autor establece que: “Art. 86.- En todo contrato de edición deberá pactarse la suma a ser recibida por el autor o titular de la obra. A falta de estipulación, se presumirá que corresponde a dicho autor o titular un diez por ciento (10%) calculado sobre el precio de venta al público de los ejemplares editados en la primera edición. Cuando el contrato de edición comprenda el derecho para hacer dos o más ediciones, o sea, por un período de años determinado, se entenderá que la suma a pagar será de un quince por ciento (15%) calculado en la misma forma”.

En algunos casos los autores cubren todos los gastos y no se auxilian de editoras.

Al tratarse de obras musicales, ejemplo: canciones, existen empresas que se dedican a buscar intérpretes, comercializar, recaudar dinero, en fin, representar a los autores en diversos ámbitos de la denominada industria musical.

Si alguien escribe una canción, por lo general contrata con una editora musical para que ésta lo represente y realice las gestiones pertinentes para la promoción y generación de recursos económicos. En muchos casos los autores se enteran de quienes interpretan sus canciones de forma ocasional, por lo general la editora puede autorizar las correspondientes adaptaciones para que la canción pueda ser un éxito cambiando de ritmo, podemos suponer lo siguiente, una canción fue escrita como balada, luego la editora musical logra que una orquesta de salsa la grabe, es necesario autorizar para hacer algunas adaptaciones porque lo que en balada puede ser un éxito puede ocurrir lo contrario en salsa.

En próximas entregas trataremos el Contrato de Edición.