EL DÍA QUE NACIÓ El COLOR VERDE DE LA FUERZA DEL PUEBLO

Eran días muy agitados, donde el partido de Bosch, luchaba por sobrevivir a los efectos de una nueva ideología, que tiraría por la borda todos los postulados erigidos sobre su moral política.

En la efervescencia del pueblo con Leonel, pensamos, que estaría el escudo para que la razón prevaleciera sobre la sinrazón.
Todas las esperanzas de preservar un legado, fueron en vano, no hubo forma de enderezar el entuerto.

La suerte estaba echada, ahí estuvimos, quienes jugamos a la ultima partida de una ajedrez político que se hizo imposible, en aras de preservar todo lo que se había logrado en materia de progreso, desarrollo institucional y empoderamiento ciudadano.

Aunque, finalmente, no se pudo construir esa aspiración de la unidad, dejamos sembrada la cimiente de que lo morado se vestía de verde, para nacer nuevamente en una primavera política que iba a rescatar el pensamiento de Bosch, y con el, al nuevo partido que encarnaría su legado, haciendo de su filosofía política, la nueva esperanza redentora de los humildes, de los descalzos, los cuales estuvieron invisibles en las políticas públicas.

El partido de Juan Bosch, desde el gobierno fue un instrumento político redentor, que liberó de la tara de la pobreza a muchos dominicanos a través de políticas focales, que redimieron a una parte de la población, donde los gobiernos anteriores se enteraba de ellos, a través de las noticias de sucesos.

El verde, es el un color del progreso, que legitima a la política , como una acción niveladora. El verde de la Fuerza del Pueblo, es la primavera de nuestra democracia. Con ella , levantamos la voz, de que mientras hayan desigualdades en la República Dominicana, siempre habrán motivos que serán justificativo para seguir levantando la bandera de más derechos sociales, y más y más justicia social. El día que el morado se vistió de verde, ese día nacía una nueva esperanza para República Dominicana.