Nota cultural —Recordando a José Francisco Peña Gómez
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Un día como hoy, 10 de mayo de 1998, murió, a los 61 años de edad, José Francisco Antonio Peña Gómez, en Cambita Garabitos, San Cristóbal, República Dominicana. Fue un poeta, locutor, orador y político dominicano. En su formación política, él mismo se autodefinía discípulo del profesor Juan Bosch. En 1970, se graduó de doctor en Derecho en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, pero se dedicó en cuerpo y alma a la política. Fue vicepresidente de la Internacional socialista, presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), alcalde de la ciudad de Santo Domingo (1982 a 1986) y tres veces candidato presidencial de la república (1990,1994 y 1996).
Peña Gómez es recordado por los siguientes aspectos: 1) Su rol estelar como locutor en la Guerra de Abril de 1965, donde llamó al pueblo a la insurrección popular en contra del golpe de Estado del presidente Juan Bosch; 2) por su gran liderazgo al frente del PRD; 3) por sus excelentes relaciones internacionales, en especial con los gobiernos y líderes miembros de la Internacional Socialista; 4) por su capacidad de convocatoria, en cada período electoral movilizó cientos de miles de personas que lo aclamaban; 5) por sus históricos discursos, donde puso de manifiesto su gran oratoria; 6) por ser un político íntegro y honesto; y 7) por su capacidad de perdonar a sus enemigos políticos.
José Francisco Peña Gómez murió en paz, no esperó que sus enemigos le pidieran perdón, él los perdonó. Por eso, comparto sus últimas palabras, cito: “Yo amo a mi pueblo, a mi país. A lo largo de toda mi vida he pagado un precio por eso. He recibido ataques feroces, a veces frontales, a veces con veneno más sutil, como ahora. Pero, yo los perdono. Mis adversarios pueden contar conmigo, con mi perdón”.