La celebración de las elecciones hace bien a lucha contra el Coronavirus

La celebración de las elecciones, el 5 de julio, puede ser el acto más contundente contra la propagación y contagio del Coronavirus en el país; y si el resultado da un ganador en primera vuelta, sería el inicio del “antídoto” perfecto.

Se debe recordar que, desde los inicios del tránsito del Coronavirus en el país, en común acuerdo con instituciones de salud a nivel mundial, las autoridades locales, han visto en el distanciamiento físico, la medida más próspera en ayudar a controlar la propagación y contagio del Covid-19 y de ahí que, el Poder Ejecutivo limitó los derechos de Asociación y de Tránsito; y para ello decretó Toque de Queda a Nivel Nacional.

Por la limitación de esos derechos, la campaña electoral se realizaba con cierta timidez, pero con las elecciones a “toque de hit”, ha arreciado y los partidos políticos, sobre todo los mayoritarios, diariamente realizan actividades de gran concentración de personas y, por ende, han roto con el distanciamiento físico recomendado y de ahí, quizás, el aumento de positivos de Covid-19 en los últimos días.

Entonces, ¿Por qué la celebración de las elecciones hace bien a lucha contra el Coronavirus?

Las razones son las siguientes:

1.- Si se celebran las elecciones y sale un candidato ganador en primera vuelta, concluiría la campaña electoral y por ende las actividades políticas-partidistas no tendrían razón de ser. Por tanto, el Gobierno estaría en la etapa de transición (sin importar el partido ganador) y todos los esfuerzos, en vez de enfrentar a la oposición en la lucha por ganar adeptos, irían a evitar y a controlar la expansión del virus.

2.- Igualmente, con la celebración de las elecciones y un vencedor en primera vuelta, los ganadores estarían enfocados en el plan de materializar el programa de gobierno que diseñaron y ex antes en, quitar, poner o dejar los empleados; y los perdedores, descansaran de sus defensas y ataques sobre las acciones o medidas del gobierno en la lucha contra el Covid-19, en tanto que, no habría mayores distracciones que enfrentar el Coronavirus.

3.- Que, aunque pudiera ser válido afirmar que la celebración de las elecciones, y lo que implica el proceso de votación, puede dar lugar al aumento de positivos, sin embargo, respetando el protocolo establecido por la Junta Central Electoral, tal postura pudiera quedarse en argumento o excusa, puesto que es una obligación Constitucional del Estado celebrar las elecciones. “Es un sí o sí”.

4.- Mayoría de votantes, de una u otra forma, con los riesgos y limitaciones, y en muchos casos sin las medidas de protección necesarias, recomendadas y demandadas, han debido hacer alguna fila o converger con personas, incluso, desconocidas, en algún Centro Comercial, Lugar del Trabajo, Medio de Transporte, Centro de Salud, etc. Para el caso de las votaciones, la Junta diseñó un protocolo que luce efectivo para evitar la transmisión y contagio de Coronavirus.

5.- Así mismo, por las consecuencias que pudiera traer la no celebración de las elecciones, donde en el mejor de los casos, continuarían las luchas partidistas, las reuniones masivas, el rompimiento del distanciamiento social, los gastos del Estado en la nueva preparación de las elecciones. Y en el peor, por el vacío Constitucional, las acciones por materializar la idea de extender o prolongar los mandatos de las autoridades actuales, lo que pudiera traer desestabilización o intranquilidad social, prolongación de los males sociales, el descuido de las medidas contra el virus y el aumento de positivos, entre otros.

En definitiva, debemos ver en la celebración de las elecciones el momento oportuno para que opositores y oficialistas, ganadores y perdedores, dejen de ver a sus contrarios políticos, dediquen y empujen todas sus ideas positivas en la identificación de las acciones tendentes a evitar la propagación y contagio del Covid-19, y al tratamiento de los positivos del virus, cosa esta que no sucederá si las elecciones no se celebran.