DE PEÑA A LEONEL-DE LEONEL A GONZALO
|DE PEÑA A LEONEL-DE LEONEL A GONZALO
“Si conoces al enemigo y a ti mismo, no debes temer el resultado de un ciento de batallas (Sun Zut, El Arte de la Guerra)”.
El conocimiento del oponente es elemento indispensable para lograr éxito en una guerra: la lucha por el poder es una guerra. En esa lucha el desconocimiento del contrincante puede acarrear perdidas inimaginables en el proceso de lograr el poder. Este punto es importante al analizar la presente coyuntura política que vive el Partido de la Liberación Dominicana en la lucha por la candidatura presidencial del año 2020.
El surgimiento dentro de esa organización política un fenómeno que hasta ahora no se había producido en su interior, dado que una figura aparentemente nueva en las lides políticas, está tratando de disputar la candidatura presidencial al presidente del partido, el cual tiene en su record haber ocupado la presidencia de la República en tres ocasiones-en elecciones en apariencias limpias-fruto del libérrimo ejercicio del derecho a votar de los dominicanos. El liderazgo de Leonel Fernández es indiscutible dentro del PLD, por tanto, la aparición en el escenario de Gonzalo Castillo hace pensar en lo sucedido en el año 1996 con el líder del Partido Revolucionario Dominicano José Francisco Peña Gómez y el entonces incipiente candidato del Partido de la Liberación Dominicana Leonel Fernández Reyna.
En el año 1996 el líder del PRD parecía imbatible frente al incipiente candidato del PLD, ello parece que llevó a los estrategas Peña Gómez a menospreciar las posibilidades de Leonel Fernández-especulando sobre el tema, dado que no tenemos datos concreto-pues siendo su rival un joven prácticamente desconocido al compararlo con el líder del PRD, quizás entendieron que no había de que preocuparse, pues el liderazgo de Peña Gómez no estaba en discusión. Tanto que además de estar muy por encima de su contendor en todas las encuestas, era una figura de trascendencia mundial. No hay duda de que el joven candidato era un enemigo que no tenía el tiempo y el liderazgo para competir con la extraordinaria popularidad que gozaba Peña Gómez.
Los hechos demostraron que no existen enemigos pequeños, pues en junio del año 1996 Leonel Fernández derroto a Peña Gómez. Se puede afirmar que confluyeron varios factores para que Fernández se alzara con la presidencia: el apoyo “incondicional” de Joaquín Balaguer al PLD, la escogencia de Álvarez Bogaert como candidato vicepresidencial de Peña Gómez, la crisis políticas que había culminado con una disminución de dos años a Balaguer en el periodo presidencial 1994-1998, entre otros factores lograron crear las condiciones que culminaron con la firma del denominado “Frente Patriótico”.
En esas condiciones llega a la presidencia el joven menospreciado por los estrategas de Peña Gómez. Pero en fin la política y la lucha por el poder es una guerra de estrategias que beneficia a los más visionarios. Leonel Fernández en aquella ocasión supo aprovechar el apoyo del líder del Partido Reformista Social Cristiano, sacrificó algunos principios en aras de lograr ascender a la primera magistratura de la nación “El fin justifica los medios”.
En la coyuntura actual del PLD las condiciones no son igual a las del año 1996, pero tienen ciertas similitudes que los asesores del señor Fernández no deben pasar por alto. Vanagloriarse de que el señor Gonzalo Castillo no tiene el tiempo, las herramientas y el liderazgo para lograr arrebatar la candidatura presidencial a Leonel Fernández los puede llevar a menospreciar la capacidad estratégica de Danilo Medida. Dado de que existe la percepción de que el presidente actual tiene sus esperanza en ésta incipiente figura de su entorno de confianza. Queda claro que Gonzalo está en la génesis de su carrera política, precisamente era uno de los elementos que menospreciaban de Leonel Fernández. Podría argumentarse también que sus condiciones de líder son cuestionable frente a la carrera política del presidente del PLD, también ese elemento se enarbolaba en contra del propio Fernández frente a Peña Gómez.
Leonel Fernández tenía detrás dos figuras de primer orden apoyándole-Balaguer y Bosch-, Gonzalo Castillo tiene tras de sí la figura de Danilo Medina, quien ostenta la presidencia de la República, además controla la mayoría de la estructura del PLD. Siendo así las cosas es aconsejable a los estrategas de Fernández tomar en cuenta los elementos comunes que se entrelazan en los procesos del año 1996 y el actual. Pues aunque por ahora se trata de un enfrentamiento para lograr la candidatura presidencial, el objetivo sigue siendo la lucha por el poder político. Que tiene la finalidad de lograr el éxito en el menor tiempo y con la menor perdida posible.
Al final se trata de una guerra no convencional, donde la estrategia no debe ser menospreciar al enemigo. Dado que la historia es cíclica, es necesario conocer el pasado para evitar cometer los mismos errores en el presente.